Magia

 Miré a mi alrededor y mi mundo se pausó por un momento. Repasé mis preocupaciones y cuáles habían sido mis problemas, lo que me aquejaba y en qué cosas se disipaba mi energía, pasé revista a mis pasados enojos y vi,con ternura, cuáles habían sido mis grandes frustaciones. Y todo aquello me pareció tan minúsculo como un pestaneo durante un día. Fue entonces que entendí que había estado vagando, con los ojos ciegos, pero ya no; ahora podía ver.

Sonrei por la gracia que me causaba todo eso, y también por el alivio al entender que nada había sido tan malo como yo había creído, nada era malo de hecho,era la vida. Me supe afortunada y con el corazón contento.

 Habrá sido cosa de un instante, solamente fue un momento a partir del que todo cambió. La alegría,  ingrediente tan poderoso y a la vez tan accesible, había cambiado mi visión del mundo para siempre. Ahora todo tenía otros colores, otra luz. Entendí entonces que 'un día' es 'este día' que 'un momento' es la vida, que mi experiencia es solo mía, y que ser feliz válida el alma.

Mis palabras empezaron a ser otras y así igual mis pensamientos, a los que le siguieron mis actos y, consecuentemente, todo mi entorno. La belleza había logrado el protagonismo y sentí con todo mi ser, nuevamente, la magia.